Navidad. Podría ser una noche cualquiera, la noche antes de Nochebuena por ejemplo, pero no es solo eso. Al menos, en la plaza de La Merced de Murcia. No, tranquilos, no está nevando. En Murcia eso es casi imposible. Es mucho más emocionante que unos cuantos copos de nieve.
Mirad bien. Hay un escenario donde se está celebrando un concierto. Una multitud, compuesta en su mayoría por familias, escucha atentamente. Entre la aglomeración, vemos a un niño de unos 10 años que no pestañea. Está observando a un hombre un poco mayor, un poco calvo y con un poco de canas que está subido en el escenario y tocando un instrumento que se llama armónica, según le ha dicho su madre. Tiene una voz que le resulta familiar. No porque le recuerde a alguien de su familia. Más bien, cree que lo ha oído en alguna película de esas que le gusta ver a papá. Películas un poco oscuras donde sale gente antigua y negritos tocando la guitarra y la armónica. Juraría que la voz de ese hombre del escenario es como la de uno de esos negritos. Es que, si cierro los ojos mamá, parece que veo a uno de esos que salen en las películas de papá. Al niño le encanta esa música que oye y le dice a su madre que ya sabe lo que quiere que le traigan los Reyes Magos: “¡Una armónica!” También quiere saber cómo se llama ese hombre un poco mayor, un poco calvo y con un poco de canas que está subido en el escenario. La madre no tiene más remedio que, cuando acaba el concierto, acercarse al backstage y preguntar.
Y ese hombre un poco mayor, un poco calvo y con un poco de canas que hace unos minutos cantaba blues en el escenario y tiene voz no de “negrito”, sino de negro, se llama Fernando Rubio. Cartagenero. Murciano. Y con voz de negro, insisto. Y con canciones compuestas y cantadas por él que no tienen desperdicio ni nada que envidiar a los maestros del blues, del soul o del country rock americano.
Cuando la madre cuenta a los presentes el flechazo de su hijo por la música de Fernando, a Claudia Orellana, directora de este evento llamado Christmas Rock, se le ponen los pelos de punta porque ese es precisamente el objetivo de este mini Festival: “Popularizar y dar a conocer las voces y los músicos que tiene la Región de Murcia a través de un repertorio de canciones navideñas del cancionero clásico anglosajón de rock, pop, etc.”, asegura Claudia. Lo de “mini” es porque se celebra en una noche, la del 23 de diciembre, porque si hablamos de los artistas que colaboran en él, el Christmas Rock de pequeño no tiene nada: “Cada uno de los invitados tiene una respetada trayectoria profesional. Este año contaremos con Juan Antonio Ross, Fernando Rubio, Óscar Ferrer (Varry Brava), Raúl Frutos (Crudo Pimento y Ben Gun Mento), Yolanda Pedreño (Malagüero) y el argentino afincado en Cartagena, Jojo Boggini (Bad Sugar)”. Todos ellos estarán acompañados por una banda de excepción, reunida en exclusiva para el Christmas Rock y formada por: Juan Gomariz a la batería (Carlos Vudú y el Clan Jukebox, el Octavo Pasajero); Marcos Justo al bajo (ex- Maldita Nerea, Joserra); José Antonio Herrera a la guitarra eléctrica y acústica (Maez); y Lucas Albaladejo al órgano y al piano (Maez, Carlos Vudú, Santiago Campillo & Electric Band, Malagüero). “Además tenemos el placer de contar con un invitado muy especial del ámbito nacional: Jorge Martínez, de Los Ilegales”. La elección del repertorio, según la Orellana, “ha seguido criterios personales de selección por parte de cada uno de los artistas. Hemos intentado que haya variedad en los estilos y en las propuestas, desde el pop, blues, jazz o rock and roll”.
Seguro que en esta tercera edición del Christmas Rock habrá otros muchos niños a los que les despertará el gusanillo de la música gracias a los grandes artistas que hay en la Región de Murcia.
Por Carmen Vilches
Fotografía: Denise Mattox (creative commons)