Juan A. Poveda: «Si haces un largometraje mal, no sirve de nada, pero si haces un corto muy bueno, muestras lo mejor de ti»
Juan Alberto Poveda, ganador del Certamen Creajoven 2011 por su documental ‘Forasteros’, nos cuenta los entresijos de su nuevo proyecto, ‘El Ritmo en sus Venas’, con todas las ganas y energía propias de su juventud. Sentados en un velador de la sede oficiosa de Revista Magma, Zalacaín, con jazz de fondo, nos muestra su creación a corazón abierto. El pasado 15 de noviembre, la Filmoteca Regional proyectó por última vez en Murcia su último trabajo, el cortometraje ‘El Ritmo en sus Venas’, donde se pusieron al alcance de sus seguidores DVD’s del corto, con contenidos exclusivos. ‘El Ritmo en sus Venas’ está protagonizado por los actores Gorka Otxoa (‘Pagafantas’, ‘Lobos de Arga’) y Eva Ugarte (‘Todo lo que sube’, ‘Hazte amigo de las gordas’). La trama trata sobre Irene, una chica cansada de que su novio Rafa, en paro, no busque trabajo. Cuando le dice que le está engañando con su jefe, ocurre algo que los une para siempre. La música tiene mucho que ver en esto.
Este corto ha obtenido hasta 17 selecciones en distintos festivales nacionales e internacionales, desde el más reciente en el de ‘Cine de Cartagena’ o el ‘Fotogramas en corto’, hasta el Festival de Caracas, ‘CHORTS 2013’, o el FICCHT (Festival Internacional de Cine del Centro Histórico de Toluca, en México) y en ‘El Samán festival de cine y video’ de Colombia. También ha quedado finalista en ‘TRAILER IN MOTION 2013’ de Portugal.
Juan, tú no eres nuevo en esto, ¿cómo empezó tu dedicación al cine?, ¿por qué los cortos?
Mi dedicación empezó desde que tengo uso de razón, me crié entre cintas de VHS, mi hermano grababa todas las películas de Canal +, y teníamos una filmoteca impresionante. Nuestro tiempo libre lo dedicábamos en vez de a salir de fiesta, a ver películas mi mellizo y yo. Cuando tenía unos doce años, mi hermano mayor, que vivía en Madrid, se compró una cámara de vídeo y nos la dejaba cuando venía de vacaciones y empezamos a hacer cortos, sobre todo de animación, al principio. Después nos lanzamos a la imagen real y poco a poco llegamos a hacer un corto cuando teníamos unos 18 años, todo en croma, como ‘Sin City’ (‘La ciudad del pecado’, 2005), en blanco y negro. Poco después nos lanzamos a hacer un largometraje, que no funcionó porque la gente si no le pagas, evidentemente, no viene y nos quedamos a la mitad.
Durante la carrera de Audiovisuales perfeccioné, aprendí más todavía. ‘Forasteros‘ lo dirigí yo porque fue un tema que me interesó muchísimo, el documental. Tuvimos la suerte de ganar el Creajoven 2011, y con ese empujón económico y de moral decidí irme a Barcelona, a la ESCAC (Escola Superior de Cinema i Audiovisuals de Catalunya), donde estudió Bayona y otros buenos directores. Esto me decidió a ir y ahí presenté mi idea, parte del máster consiste en presentar un corto, se presentan veinte, se hace una criba de los que más gustan, se seleccionan diez y de esos se hace una presentación a varios productores. Conseguí vender mi proyecto, ya había hablado con los actores, que les gustó la idea y querían participar, y salió. La escuela me dio 6.000 euros, yo invertí también y este ha sido el resultado.
Por otra parte, el corto gusta porque es la mejor forma de contar una historia breve y sobre todo menos complicado que un largometraje. Si pudiera, desde siempre, habría hecho largos, pero de momento no es posible y optas por lo que está a tu alcance, y además, sirve como práctica y para mostrar lo que puedes o sabes hacer es el mejor formato. Si haces un largometraje entero mal, no sirve de nada, pero si haces un corto muy bueno en poco tiempo, muestras mejor lo que sabes hacer.
¿Qué ha significado para ti, a nivel personal, estudiar en la misma escuela que Bayona, Kike Maíllo…?
Fue el punto en el que más me acerqué a que se cumpliera un sueño de la infancia, que luego lo superó hacer el corto. Digamos que fue un paso más, muy ilusionante, pero al fin y al cabo es una escuela de cine en la que puede entrar la gente que haya estudiado una carrera de Audiovisuales y tenga el dinero para entrar. Fue un paso más y muy importante, que luego me llevó a este corto.
¿Quiénes son tus directores de cine de referencia o cómo definirías tu imaginario cinematográfico?
Sobre todo Steven Spielberg, Stanley Kubrick, Tim Burton, Scorsese, Woody Allen, los típicos. Y españoles, Amenábar, mi película española favorita es ‘Tesis’, que cumple muchos patrones de cine americano. Pero no me gusta incluirme en corrientes de directores, lo que he hecho en ‘El Ritmo en sus Venas’ es diferente a lo que ellos hacen.
¿De dónde nace la idea de escribir ‘El Ritmo en sus Venas’ por Juan y Pedro Poveda?
Nació en la Universidad, hace unos tres años, la idea inicial se mantiene en el corto, pero el personaje protagonista, Irene, era totalmente diferente, con los años ha ido evolucionando. En la ESCAC, viendo cómo se hacen bien las cosas y contando con el apoyo que podía conseguir de esta escuela, me decidí a hacerlo. En ese momento fue cuando mi hermano, Pedro Poveda, se unió al proyecto ayudándome sobre todo en diálogos del guión y conflictos de la trama. Tuvimos sólo dos meses para hacerlo porque había fecha límite de rodaje y fue un poco precipitado. Pero, dentro del tiempo que tuvimos, estoy convencido de que ha salido bien.
¿Cuándo comenzó el proyecto y cuáles son las localizaciones que podremos encontrar en ‘El Ritmo en sus Venas’?
El proyecto surgió en una práctica de la ESCAC, primero se hacen dos cortos, el primero fue este que nos ocupa y el segundo ‘El Ritmo en sus Venas versión beta’, es decir, evolucioné la idea a los parámetros que quiere la ESCAC, un planteamiento, nudo y desenlace bastante claros. Esto me sirvió para comprobar si era viable llevar mi idea a un corto. Cuando tuve que presentar el proyecto, lo mejoré, lo adapté, cambié localizaciones, arreglé los fallos que tuve. Ahora si pudiera hacerlo, arreglaría todavía más fallos -dice Poveda entre risas-.
En cuanto a las localizaciones, vais a ver Barcelona y alrededores, Rubí, y la casa del mago Selvin, que salía en el famoso programa de televisión ‘Un, dos, tres’. Fue muy amable y nos dejó cambiar lo que quisimos dentro de su casa para poder grabar. Y sobre todo, la sala de conciertos en Barcelona, Sidecar Factory Club.
¿Por qué otro corto más sobre historias de pareja, infidelidades, amor, desamor…?, ¿qué distingue a ‘El Ritmo en sus Venas’ dentro de la comedia romántica?
La diferencia está en que es una comedia romántica musical, porque no es el musical al uso, en el que se ponen a cantar al aire. En ‘El Ritmo en sus Venas’ los protagonistas se ven forzados a que siempre haya música en el ambiente -como nos estaba ocurriendo a nosotros en Zalacaín, durante la entrevista con el jazz de fondo-.
Es un corto que hay que verlo, no se puede explicar. Lo que me gusta es que la gente llegue y comience a verla, en las proyecciones anteriores la reacción del público es muy fuerte, se ríen, es algo que no han visto nunca, porque lo que pasa en este corto no se ha visto nunca. El público se adapta a lo que está viendo y notan que es algo divertido. Si lo cuentas pierde la fuerza, por eso es difícil definir qué diferencia a este corto sin decir lo que es. Digamos que sin ser una comedia musical en la que se canta sin razón, aquí lo hacen por una fuerza mayor, algo del mundo real que hace que siempre tengan que estar tocando.
El peso de la música es importante en esta cinta, ¿quién es el autor?, ¿y los intérptretes?
El compositor es Sergi Puig, de Barcelona, participó en la posproducción. Previamente, la canción principal, que se repite a lo largo del corto, es un tema del grupo ‘Thee brandy hips‘, que está en la productora Warner, y nos compuso la canción. Ellos no lo pudieron grabar, pero para eso estaba Puig.
El hecho de que el personaje de Rafa esté en paro, ¿intenta contemporizar con la situación actual?
Es una escusa para lo que viene después en la trama, pero me venía de lujo porque es una situación muy actual. El personaje es un poco despreciable, es una persona en paro que no busca trabajo, prefiere estar sin hacer nada. Esta situación detona lo que viene después.
¿Por qué la elección de Gorka Otxoa para el papel de protagonista masculino, Rafa, y Eva Ugarte el femenino, Irene?
Porque con los papeles que había interpretado anteriormente Gorka, el personaje le iba a medida, y Eva Ugarte, que es su novia en la vida real, y en este corto, da el perfil ideal. Por desgracia su personaje, Irene, es un poco gruñón, está todo el tiempo quejándose y cabreada al principio de la historia. Eva encaja perfectamente en el papel y la química entre los dos es real, llevan mucho tiempo juntos y tienen detalles que le dan fuerza a la interpretación. Ahora están haciendo una obra, con bastante éxito en Madrid, que se llama ‘Los miércoles no existen‘. Trabajan juntos siempre que pueden y ella está empezando a abrirse camino entre las jóvenes actrices, ahora va a salir en una serie de Antena 3. Esta pareja le dio mucha vida al proyecto y se animaron a trabajar juntos en cuanto lo conocieron.
Rubén Sánchez (W. Bannon), es bastante peculiar, ¿el personaje está hecho a su medida?, ¿por qué pensasteis en él?
Su presencia en el corto se debe a que el personaje protagonista, Rafa, tiene un grupo de música y tenía que ser un grupo pequeño. Mi intención era estereotipar a los componentes para que no hiciese falta presentarlos demasiado. Uno de ellos es un tipo más calmado y más trabajador; y el otro es el extremo contrario, está siempre bebiendo cerveza, fumando, rellenito…guarrete, ese es Bannon. Y dio la casualidad de que mi ayudante de producción me pasó la foto de un «personaje» con un piercing y que no era actor, y le iba muy bien al personaje. Decidimos probarlo y funcionó perfectamente, muy suelto, le gustó la experiencia y todo el rato alababa a su personaje, que era él mismo. Mejor que mejor, porque no tenía que actuar. Tiene su propio grupo de música y me venía genial para que formara parte del grupo de Rafa. Fue una buena experiencia contar con alguien que no es actor y probarlo en un corto profesional.
Habéis obtenido más de una selección al mes, en distintos festivales, durante este año, nacionales e internacionales, en Portugal, Colombia, México, ¿cuál ha tenido mayor impacto en la difusión de ‘El Ritmo en sus Venas’?
Para mi las selecciones son casi como premios, cuando te seleccionan ya lo puedes poner en el curriculum del corto porque las selecciones son muy pequeñas. Al haber tanta masa de cortos, tanto a nivel nacional como internacional, ya con que te seleccionen es un premio en sí. La selección que más nos ha llamado la atención ha sido la de la revista Fotogramas y la del Festival Internacional de Cine de Cartagena, que han sido las más recientes y las más importantes. Estamos muy contentos con el reconocimiento que está obteniendo el corto, ahora faltan los premios, para que empecemos a recuperar la inversión y el esfuerzo empleados.
¿Cómo fue la acogida del corto el pasado octubre en el Aula de Cultura de la CAM?
Tuvimos el estreno en Barcelona, que fue el oficial con el equipo, y fue la puesta de largo delante de gente que sabe del tema. La acogida del público , como siempre digo, reaccionan muy fuertemente al plot point (punto de inflexión) inicial y suelen reír en los momentos que están pensados para provocar el humor en el guión, porque es una comedia. Y al final hay un giro total para intentar sorprender al espectador que también funciona. Es la gran suerte, intentas que estos efectos funcionen y estás en tensión hasta que lo ves por primera vez con público y ves que responden como esperabas. No se si va a conseguir premios, pero al menos sí consigue su función, que es sorprender y sacar una sonrisa al espectador.
¿Qué esperáis de vuestra selección en el Festival Internacional de Cine de Cartagena el próximo diciembre?
Es la sección murciana, si ‘El Ritmo en sus Venas’ va a ganar algún festival va a ser este. Si no, ya me puedo olvidar, porque es el más acotado, el que más da el perfil para poder ganarlo. Pero el corto tampoco se hace para ganar, se hace para que la gente lo vea, para darte a conocer. La verdad…es que esperamos ganarlo -dice el joven director con las esperanzas propias de tanto esfuerzo y saber que el trabajo está bien hecho-.
¿Qué supone para vosotros que os haya seleccionado la prestigiosa revista ‘Fotogramas’ para que ser votados el próximo diciembre en ‘Fotogramas en corto’?
Es un empujón muy importante para nosotros, ahora, que la competencia en este caso es brutal, creo que son 30 o 40 cortos los que compiten y un par de ellos son de gente conocida, que sólo por ser conocidos y tener muchos seguidores en twitter, van a tener un apoyo muy importante. En cuanto al premio del público no tengo muchas esperanzas; también está el premio del jurado, compuesto por críticos. En cuanto a premios no hay demasiada esperanza porque la competencia es muy buena, pero lo importante es haber aparecido en Fotogramas.
¿Cuáles son tus proyectos actuales, ya que también haces videoclips, spots…?
Ahora mismo estoy haciendo un videoclip para Joaquín Talismán, que se estrenará en un par de semanas; y dos documentales, uno de ellos se estrenará a mediados del 2014 y trata sobre músicos murcianos y el panorama musical de la Región, que está ahora en fase de producción.
Entrevista: Francisco Javier Nieto
Colaboradora: Carmen Vilches
Fotografías: Tania Buendía
Lugar: Zalacaín, Murcia
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Este tío es una máquina, y estoy seguro que muy pronto se hablará más de él.
Álvaro, gracias por seguirnos. Estoy seguro de lo que dices. Juan lleva dos documentales entre manos, el que trata sobre el panorama musical de la Región de Murcia dará qué hablar. ¡Un saludo!
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