Rafa Pacheco: “En España estamos atrincherados, nos hace falta madurez democrática”
Rafa Pacheco es inclasificable: se mueve como pez en el agua en las redes sociales (incluso ha creado una), es activista político, economista y blogger, entre otras cosas. Si te pones a pensar, no sabes de dónde le saca horas al día para poder estar en todo. Este murciano de 26 años ya se ha labrado un nombre en Internet y las visitas a los artículos de su blog personal se cuentan a millares. Rafa no se queda en la orilla y nada hasta la explicación de los problemas sin dejar títere con cabeza. Magma viajó a Madrid y quiso charlar con él entre güisquis, gintonics y unas patatas fritas, en un bar cercano a la calle Orense. Durante la conversación, le pedimos a Rafa Pacheco que nos intente definir a Rafa Pacheco.
Rafa: Mira si es complicado que yo tengo un montón de cuentas de Twitter, y cada una es un perfil diferente. No verás a mucha gente que me siga en todos los perfiles. Soy un tío muy activo y me gusta tocar diferentes palos. Está, primeramente, Rafa Pacheco: un chico de 26 años, de Murcia, que trabaja en Madrid; luego está el Rafa Pacheco activista, al que no le gusta el sistema político y económico en el que vivimos y entonces, hace una serie de propuestas a través de un blog que creó hace unos años y que ahora cuenta con un gran número de visitas. Gracias al blog me llaman de distintos programas (televisiones locales, Intereconomía) para pedir mi opinión; luego está el Rafa Pacheco emprendedor, con Qué Buen Rollo; y por último, está el Rafa Pacheco que lleva el Social Media Marketing de empresas, pero nunca verás nada relacionado con mi nombre y esas empresas. En mi sector hay mucho gurú, que dedica más tiempo a crear su marca personal que a los clientes que lleva. Si alguien quiere saber cómo soy profesionalmente, lo remito a mis trabajos en empresas. Mis perfiles personales son eso, personales, y en ellos no me dedico a sentar cátedra, como mucha gente de mi sector.
Has trabajado en una aseguradora, una eléctrica, una agencia de marketing online, y ahora estás en otra aseguradora
Sí, no he parado, en la última llevo poco más de un año. Yo soy su Social Media Manager: les llevo toda la estrategia digital en redes sociales y la verdad que nos está yendo muy bien.
Sois la entidad, dentro del sector de las aseguradoras, más influyente en las redes sociales.
Si la influencia en redes sociales se puede medir (que hay quien piensa que sí y quien piensa que no), con el indicador Klout, que es el más famoso, somos los más influyentes del sector asegurador y financiero. En Twitter somos los únicos q superamos los 25.000 followers, y en Facebook los primeros del sector que mejor llevamos la fan page, según LikeAlyzer. No somos una empresa muy muy grande, pero nos están conociendo, hemos conseguido destacar en redes y estamos bastante contentos.
¿Cuál es tu trabajo específico?
Yo analizo los productos de la empresa, su sector, la clientela a la que se dirige. Analizo con su equipo de marketing y con su directiva todo lo que son y todo lo que quieren ser. Entonces, implemento una estrategia en redes sociales, que al fin y al cabo son la ventana al mundo, para que esa imagen que quieren transmitir sea la que refleje y aparezca en ellas. Es un trabajo de día a día. No puedes establecer tus canales y decir: ya está. Luego, pueden hablar mal de ti y si no lidias con la situación, cuando te busquen por Internet, lo primero que verán es eso. Hay que mantener la imagen de la empresa día a día.
Tanto para las empresas, como en los perfiles personales, hay que tener cuidado con lo que se dice y hace en Twitter y Facebook, ¿no?
Las dificultades son parte del día a día. Yo me he encontrado con directivos de empresa que dicen: “no, como en Facebook y Twitter existe la posibilidad de que te critiquen, me voy a plantear la posibilidad de estar o no”. No, para mí, y para toda persona que tenga un leve conocimiento de marketing, las redes sociales son un must. Tienes que estar en las redes sociales. Otra cosa es cómo lo gestiones día a día. Lo primero que debes hacer es tener a alguien que sepa del tema, alguien que lleve una gestión profesional de tus redes. ¿Y si te encuentras una crítica? Pues pregúntate si es un crítico racional (una persona normal que ha tenido un problema con nosotros y lo manifiesta), o es un troll, que por más que discutas con él no vas a solucionar nada. Si es el primero, y esto es una de las grandes ventajas de las redes sociales, tú puedes solucionar su problema, tratarle bien, y que esta persona disgustada con tu empresa se convierta en embajador de tu marca. Porque si solucionas bien su problema, lo primero que va a decir es: “oye, mira qué bien estos chicos”. Al troll no hay que hacerle caso. La experiencia te hace saber cómo funcionar en esos casos. Cuando tienes experiencia, a los trolls los distingues a la legua.
¿Qué ingredientes son esenciales para llevar las redes sociales de una empresa o de una persona?
Lo primero es tener a alguien que sepa. El mayor error que cometen las empresas es pensar que las redes sociales son una tontería y dejar que las lleve el becario, o Fulanito, que sabe de ordenadores. En el momento que haces eso, le das una importancia tan baja…El chico no va a saber cumplir con el día a día de la empresa y al final te va a generar más crisis que soluciones. Después, es imprescindible tener una estrategia. No vale contratar a alguien y que lleve las redes. Lo primero que hay que hacer es saber qué quieres de las redes sociales, a quién buscas dirigirte en ellas, en cuáles quieres estar, con qué tono… Esos pasos previos, de análisis y marcar objetivos, si te los saltas es como si te tiras al vacío y luego intentas volar. Antes de tirarte al mar, construye un buen barco.
#Québuenrollo
Eres el fundador de Qué Buen Rollo. Siempre que hablo de la página, digo: “¿Conoces la página Asco de Vida? ¡Pues esta es lo contrario!”
(Risas) Sí, es lo contrario. Nace de una coletilla que yo tenía en los primeros años de universidad. Cada vez que me gustaba algo, decía: ¡qué buen rollo! Y mis propios amigos, de cachondeo, también lo decían. Cuando creo la página ya estábamos en crisis y en las redes sociales la gente no hacía más que quejarse. Me metía en ellas y solo veía a la gente triste, compartiendo malas noticias. No había ninguna página que aglutinara mensajes positivos. Teníamos anuncios de Coca-Cola y poco más. Entonces, pensé que por qué no había un sitio donde no hubiera malas noticias y donde la gente no estuviera quejándose todo el rato. A día de hoy, 60.000 personas siguen la página en Twitter. Hay mercado, la gente quiere compartir las cosas que le dan buen rollo.
Sí, porque parece que solo hay malas noticias. A veces la gente no sabe encontrar la parte positiva a las cosas malas
Claro. Yo sé que la situación está muy mal, pero me implico. Por ejemplo, para el último artículo de mi blog, me pasé todo el fin de semana estudiando leyes, leyendo informes del Tribunal de Cuentas, para poder demostrar que una determinada ley no sirve para nada, y explicar cómo se puede arreglar. Pero aparte de quejarme y pedir cambios, también veo las cosas alegres. Aporto mi granito de arena diciendo que estos cambios son los que demando, pero también aporto regalándoles a los usuarios una plataforma para que compartan sus buenas experiencias.
Eres un tipo políticamente activo
Más que políticamente activo, me considero activista político, entre comillas.
Las dos Españas
Te vemos defendiendo tus ideas en algunos debates televisivos. ¿No crees que se han convertido en un circo en el se está compitiendo por ver quién habla más fuerte o quién la tiene más larga?
Sí, y es que en España no tenemos aún cultura política, entonces los debates tienen un nivel bajísimo. Cuando he ido a la televisión, a cualquier debate, lo primero que hacen los tertulianos, o como los quieras llamar, es analizar dos o tres minutos de tu discurso para ponerte una etiqueta. En el momento que te ponen esa etiqueta, ya cogen todo la retahíla de tonterías de un lado o de otro, y van a intentar pillarte. Yo, que me considero una persona liberal y progresista, socioliberal, ¿cómo le explico a una persona que me quiere poner una etiqueta de izquierdas o derechas que estoy entre la socialdemocracia y el liberalismo, en tanto que quiero mantener el estado del Bienestar, pero no quiero que se siga despilfarrando con la elefantiasis del Estado que tenemos?. No lo va a entender. Si yo defiendo la sanidad pública, porque me implico en la Marea Blanca y demás, me va a llamar rojo. En el momento que digo que me parece bien que se fusionen ayuntamientos o que quiero acabar con las subvenciones, tanto a unos como a otros, me llamarán facha. En España no hay cultura política. Aquí buscamos la etiqueta.
La historia de las dos Españas…
Totalmente. No somos capaces de hablar solo de ideas. Estamos atrincherados. Es muy triste, y yo como buenrollista se supone que no debería decirlo, pero es que no veo solución a corto plazo. Nos falta muchísima cultura política.
Hablas de las etiquetas ideológicas y recuerdo un post en el blog Cuarto Poder, en el que se te llama upeydísta. Mandaste una rectificación de que no estabas afiliado al partido de Rosa Díez y que no formabas parte de ellos.
Hace muchos años, mi padre nos dijo a mis hermanas y a mí que no formáramos parte de ninguna lista: “Niños, vuestro nombre solo en el DNI, y porque es obligatorio”. Yo he intentado llevarlo a rajatabla. El nombre de mi blog es mi propio nombre, rafapacheco.com, no quiero que se me meta en ninguna temática, quiero poder ser totalmente independiente. Pero como en las últimas elecciones, al analizar las diferentes opciones desde el blog, recomendé a UPyD, pues la gente ya tuvo su excusa. La estaban deseando para poder señalar y decir: “Eres de UPyD”. No, en todas las elecciones analizo el programa del partido y su trayectoria, y luego, decido. El que tenga amplitud de miras, lo entenderá, y el que no, pensará que por votar a UPyD ya soy de ese partido. Y es debido a ese hooliganismo que existe en la política española: si votas a uno, ya tienes que votarlo siempre. En el Senado, por ejemplo, voté a Escaños en Blanco, y lo dije abiertamente. Pero, claro, como es un partido minoritario y no lo conoce casi nadie, nadie me pone esa etiqueta. También mucha gente me dice que Rosa Díez es tal y cuál. Yo les digo que he votado a Manuel Hernández, que yo he votado en Murcia. ¿Qué me estás contando de Rosa Díez? Yo he votado un programa. Pero en España se sigue votando una cara, o por si te cae mejor o peor. Necesitamos un poco de madurez democrática.
No te ves en ninguna lista de un partido político, ¿no?
Es difícil que yo entre en un partido político porque soy bastante crítico y si viera algo del programa que no me gustara, daría bastante caña. Y eso en las formaciones políticas actuales no te creas que está muy bien visto. Además, no creo que esté suficientemente formado como para representar a la sociedad en ninguna institución. En un futuro, con 50 años, como independiente en una lista, pues a saber…No me importaría, porque quiero cambiar las cosas.
Viendo las actitudes de los políticos actuales, se me antoja difícil llegar a esa madurez democrática de la que hablas.
Ahora mismo estamos viviendo una demonización de la clase política per se. Lo que han hecho PP, PSOE, IU y nacionalistas, que son los que yo llamo el establishment, nos hace pensar que todos los políticos son iguales, que todos los que lleguen van a ser iguales. Es un error en el que no debemos caer los que estamos medianamente preparados y tenemos interés en cambiar las cosas. ¿Todos los políticos son iguales y no vemos una clase política con interés en cambiar las cosas? No, no lo vemos en el establishment, en esos 4 que se repartieron la tarta del poder en la falsa transición que tuvimos (tan mitificada como está), con una Ley Electoral totalmente injusta y con un reparto competencial a las Comunidades Autónomas que deja mucho que desear. No todo el que es político es malo. Por ejemplo, Irene Lozano, que es una diputada del Congreso que se presentó por UPyD aunque iba como independiente. Coño, la sigo activamente y creo que está haciendo una labor estupenda. ¿La podemos meter en el saco de la clase política? No, creo que hay que diferenciar. Aquí al lado, en Torrelodones, gobiernan Vecinos Por Torrelodones, un grupo de personas que ha llegado esta legislatura y ha pegado un vuelco increíble al Ayuntamiento, tanto que han conseguido superávit al eliminar toda la red clientelar que tenía el anterior consistorio. Son políticos, pero no forman parte del establishment, hay que tener muy clara esa diferenciación.
Aun así, ¿crees que el que entra en el poder puede no corromperse de alguna manera? Si no, mira lo que está pasando con los sindicatos…
Es que a UGT y a CCOO los considero parte del establishment, si no mira como estaban en los consejos de Administración de las cajas de ahorros, desde las que dilapidaron nuestro dinero. Y no olvidemos que la mayoría de los protagonistas del rescate bancario, pagado con nuestro dinero, son cajas. Entonces, ¿sindicatos? Los habrá buenos, desde luego UGT y CCOO, no. Y en cuanto a la corrupción, nos quieren hacer creer que los que lleguen harán lo mismo y que si no han robado ha sido porque no han tenido la oportunidad. Ese supuesto es una falacia, porque no puedes ver el futuro. Tiene fácil solución y lo dije en un tuit que de vez en cuando rescato: paso 1, dejar de votar a los que han robado; paso 2, votar a otra gente; y paso 3, si a los que has votado también roban, volver al paso 1. Eso es la democracia: castigar al corrupto y premiar al honrado.
¿Estás en contra, entonces, de la financiación pública a partidos políticos y sindicatos?
Creo que no deberían tener financiación pública. Que cada cuál se financie con las cuotas de sus afiliados. Y luego, tenemos la Ley Orgánica sobre Financiación de partidos, que no sirve para nada porque incluye una trampa para que no tengas que declarar las donaciones que recibes. Habría que cambiarla entera. En Estados Unidos, financian a los partidos las grandes corporaciones, pero es todo transparente, sabes qué empresas están detrás. Aquí no sabemos nada. Los financiamos a todos por la cara, ¿por qué tengo que dar mi dinero a partidos del establishment? ¿O a otros partidos que tampoco comulguen con mis ideas? No estoy de acuerdo. Debería haber una ley que hiciera que todas las donaciones se declarasen. A día de hoy, si tú quieres dar dinero a un partido sin declararlo, lo único que tienes que hacer es darlo a su fundación y decir que está destinado a un proyecto concreto.
¿Crees que la nueva Ley de Transparencia puede cambiar algo?
Deja mucho que desear. Es bombo y platillo del Partido Popular. Algo han hecho. Venimos de algo tan malo que a poco que hagas ya parece mucho, pero deja mucho que desear. En el momento que tú pides una información y ellos se guardan una serie de coletillas para explicarte que no te la dan en base a esto y a lo otro, ¿qué transparencia hay?
15M, o la historia de un intento fallido
Fuiste muy activo durante las protestas del 15M, ¿por qué crees que no funcionó?
Escribí un artículo ya en el verano de 2011, por el que mis compañeros del 15M me dieron mucha caña, en el que decía que el 15M había muerto. En el 15M éramos dos grupos muy claros: por un lado, los radicales que querían acabar con todo y generar el caos; por otro, los que queríamos cambiar aquellas partes del sistema que no funcionaban, los que abogábamos por ‘reformarlo’. Los radicales directamente querían y quieren tirar abajo el sistema. Éstos son los que defienden la violencia, la quema de contenedores, etc. Eran el 2%, pero también los que más ruido hacían. Entonces llegó toda la maquinaria del establishment, que coge a los medios de comunicación y les dice que sólo saquen a los radicales, que nada de reflejar al 98% de moderados que estaban pidiendo cambios en el sistema sin romperlo. Entre los dos se cargaron el 15M, los primeros por radicales, y los segundos por hacer a los radicales dueños de la protesta.
Conociste en un tren a Alberto Garzón, que estuvo muy involucrado en las protestas del 15M
A mí, Alberto Garzón, como quincemayista, me decepcionó, porque se manifestaba contra las deficiencias del sistema en el que estamos, y luego se metió a un partido que forma parte de ese sistema, de esa élite extractiva. En clave económica, Alberto y yo tenemos ideas radicalmente opuestas. Coincidimos en un AVE a Málaga y lo abordé para que nos tomáramos un café. Él tiene unas ideas que yo no comparto para nada, pero las tiene fundamentadas. Es decir, no es alguien que hable de oídas. Debates con él y te lo defiende todo, cosas que a mí me resultan disparatadas, pero que al menos argumenta. En eso se diferencia del resto, pero lo que dice su partido es un imposible. Tuvimos un problema en Twitter, porque conté que tomándonos ese café, él mismo me había reconocido que el programa económico de IU es inviable. No es que él lo verbalizara directamente, pero cuando yo se lo decía, él me contestaba que había que cambiar muchas cosas, que era consciente de ello…Es que es un imposible, por ejemplo, la falacia de la auditoría de la deuda. Me parece muy bien que se analice todo lo que se ha gastado y se busquen responsabilidades patrimoniales y penales para los que hayan derrochado nuestro dinero, pero no puedes utilizar esa excusa para declarar el default. Además, si lo que quieres es un default, explica sus consecuencias, explica que tendríamos que abandonar el euro y perderíamos la mitad de nuestra riqueza, con una brutal devaluación de la peseta, porque es eso lo que va detrás de la auditoría. O lo de las pensiones mínimas de 1.100€, que está muy bien decirlo, pero, ¿cómo las pagamos? Y así otras 100 cosas en su programa, que a día de hoy son inalcanzables.
Murcia y su establishment
¿Cómo ves Murcia desde fuera?
Si te das cuenta, todos los problemas de España, los tienes en Murcia a pequeña escala. Murcia tiene un establishment acojonante, el mismo que hay en Andalucía con el PSOE. Tantísimo tiempo, la misma gente, es una pena. Y esto también está fundamentado en la Ley Electoral, ya que siendo Murcia uniprovincial, tiene cinco circunscripciones. Es un disparate. Y dejando a un lado la política, quizá el error que tenemos en Murcia es que no sabemos venderlo en el resto de España. La frase de “Murcia es la gran desconocida” sigue siendo totalmente real. Cada vez que llevo a gente de fuera se quedan impresionados. No son conscientes de la riqueza cultural de la ciudad, ni siquiera de lo grande que es. Y el error no es solo del resto, pecamos un poco de chovinismo murciano: nos encanta quedarnos y no perder de vista nuestros cuatro castillos, en el momento que te alejas un poco, ya echas de menos Murcia y quieres volver. Creo que deberíamos ponerla en valor mucho más.
¿Piensas en volver?
No creo, pero porque no veo oportunidades laborables equiparables a las que aquí tengo. De hecho, si me planteara en un futuro cambiar de lugar de residencia, sería fuera del país.
Muchos murcianos están buscando fuera lo que no encuentran en España, ¿qué te parece?
Que los están echando. Son gente que se ha sacado su carrera, su máster, que han aprendido idiomas, y que cuando han salido al mercado laboral se han visto desprotegidos, con un paro juvenil superior al 50% ¡Pero si ni siquiera nos reconocen nuestros títulos en el extranjero! Somos una generación totalmente maltratada, y que encima no es culpable de la crisis en tanto en cuanto nosotros no pudimos votar a sus culpables. Porque no nos engañemos, los culpables están aquí, te dirán lo de la crisis mundial, y que no ha sido su culpa, pero no es así. Una cosa es la crisis financiera mundial, otra nuestra crisis de deuda, que podíamos haber evitado. Cuando estalló la burbuja inmobiliaria y el Estado dejó de ingresar tantísimo dinero por compra-venta de inmuebles, el establishment decidió reemplazar esos ingresos con deuda, para poder seguir gastando lo mismo. Prefirieron endeudarnos a recortar su despilfarro. La culpa de nuestra crisis es nuestra, no intentemos echársela a Lehman Brothers.
Entrevista: David Cano Fotografías: Sofía Fernández Lugar: Café&Té, calle Orense (Madrid)Deja un comentario
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Como siempre he dicho sobre Rafa Pacheco: tiene las ideas claras de los verdugos y los mártires. Además de coherente, no tiene pelos en la lengua y eso no tiene precio.
El único pero que le pongo es que no nombre con algún apodo o calificativo a sus followers, xD.
Saludos.